Hoy te traigo a María, que le he realizado este tratamiento con células madre sanguíneas para su artrosis de manos o rizartrosis.
Como podrás escuchar en su testimonio está encantada con los resultados, ya que por fin puede realizar actividades cotidianas con sus manos que no podía realizar antes y lo mejor: no tiene que tomar analgésicos o corticoides que es el tratamiento clásico para esta dolencia.
Habrás podido ver que la semana pasada fui invitado a dar una charla sobre este tipo de tratamiento para el grupo nacional de estudio de terapias biológicas (GRESTBI) dentro de la Sociedad Española de Traumatología Deportiva (SETRADE).
Este tipo de tratamiento es un tratamiento muy novedoso, fácil de realizar y sin posibilidad de rechazo, ya que, se realiza con tu propia sangre en el mismo lugar de la extracción. Se extrae sangre como para un análisis de sangre (60-120ml).
Gracias a un sofisticado sistema de filtrado, se concentran tus propias células sanguíneas encargadas de la reparación de tus tejidos y se introducen en directamente gracias a un ecógrafo de alta precisión en el lugar donde queremos que actúen, para garantizar una máxima eficacia
El proceso que puede durar entre 30-60 minutos, dependiendo la/s zona/s a tratar. Se realiza en un ambiente estéril y con anestesia local en la mayoría de los casos.
Para patología articular y tendinosa se usa una única aplicación. Tras la infiltración no hay que realizar reposo absoluto y puedes hacer vida diaria normal suave sin esfuerzos deportivos.
Principalmente el uso de monocitos lo uso hoy en día para el tratamiento de la artrosis degenerativa articular, principalmente en articulaciones de manos y muñecas, pero también se puede usar en cualquier articulación grande como rodilla, cadera, tobillo y hombro.
Si estás en la misma situación que María o tienes algún familiar o conocido que lo está, no dudes en recomendarles que pida consulta conmigo para poder valorar su caso de manera personal y poder empezar a cambiar su vida.