Hoy vengo a contarte un poco más sobre el apasionante mundo del plasma rico en plaquetas o en factores de crecimiento (PRP).
El PRP es una alta concentración de plaquetas obtenida de tu propia sangre en forma de suero. Las plaquetas son responsables de la coagulación y contienen en su interior factores de crecimientos, moléculas y citoquinas necesarias para estimular la regeneración de los tejidos y la cicatrización de las heridas.
El PRP es altamente rico en moléculas bioactivas que ejercen un efecto analgésico, antiinflamatorio, de proliferación celular y de formación de nuevos vasos sanguíneos, favoreciendo y estimulando la reparación de los tejidos y el alivio del dolor.
De forma resumida, los beneficios del PRP son principalmente estos:
- Estimula la regeneración de los tejidos.
- Favorece la cicatrización biológica.
- Reduce la inflamación y el dolor.
- Mejora la vascularización.
Además de estos beneficios, otra gran ventaja es que es tuyo y es 100% compatible sin posibilidad de rechazo y tiene una efecto bactericida. Es decir que ayuda a combatir las posibles infecciones en el lugar de la inoculación.
El PRP se utiliza en Traumatología de manera eficaz y científicamente probada para:
- Lesiones tendinosas y musculares: tendinopatías, roturas tendinosas, tendinitis agudas y crónicas y roturas fibrilares.
- Lesiones articulares: Artrosis en rodillas, caderas, hombros, tobillos, manos.
- Heridas y úlceras: Mejorando la cicatrización de las heridas quirúrgicas y úlceras diabéticas y por decúbito.
Por todos estos motivos el PRP está considerado el gran aliado para mejorar cualquier patología osteoarticular y muscular y obtener una plenitud articular.
Si tienes alguna pregunta o quieres saber si el PRP puede ser la solución para tu caso personal, no lo dudes en contactarme o pedir una cita presencial u online.